La vitalidad del género negro le permite adaptarse a cualquier coyuntura social e histórica, cuando no ser testigo de su más oscura faceta. Es por ello que aunque altere sus coordenadas habituales y más o menos arquetípicas conserva su esencia con independencia del escenario que pise, como bien demuestran algunos de los últimos títulos aparecidos.
El salvaje Oeste
El inicio de la nueva serie del sello Vértigo titulado 'Scalped', publicada en España por Planeta, demuestra que el género negro no es incompatible con el western. O al menos con el protagonismo de los pieles rojas y los escenarios habituales del Oeste. Tan original planteamiento es idea de Jason Aaron, también guionista de 'The Other Side', autor que toma como escenario una reserva sioux de Dakota del Sur y por personajes a los restos de la orgullosa nación india.
Humillados y despojados por el hombre blanco, los nativos sobreviven en la miseria mientras que algunos jefes de tribu se han convertido en líderes del crimen organizado desde sus casinos de lujo. Dash Caballo Terco es el protagonista de esta turbia historia, un indio lakota rebelde y pendenciero que regresa a su pueblo y termina por formar parte de la policía local. Su problemática presencia va a desenterrar dolorosos recuerdos a la vez que desencadena una explosiva sucesión de acontecimientos
R. M. Guéra, habitual en la revista Heavy Metal, practica aquí un dibujo vigoroso, dinámico y personal, violento como la historia que refleja. Una trama de corrupción y muerte alrededor de un misterio desarrollado con buen pulso y un acertado tratamiento de los personajes.
París años 30
Planeta también permite conocer al lector español un trabajo tan escasamente convencional como el de los franceses Hubert y Kerascoët, firma esta última que agrupa a la pareja de dibujantes Sebastien Cosset y Marie Pommepuy. 'La virgen del burdel' recopila dos álbumes cuyo argumento tiene lugar en el Paris de los años 30, un ambiente de anteguerra donde un asesino sangriento se dedica a mutilar jovencitas ante el aterrado desconcierto de la policía y el público. Blanca es testigo de la muerte de su hermana y el rastro del criminal la impulsa a introducirse en un conocido burdel frecuentado por las clases más altas: allí se convertirá en la única prostituta que se mantiene virgen ya que oficia como severa dominatrix de lujo mientras investiga los entresijos del caso.
Con un grafismo estilizado y expresivo, los autores desarrollan tan insólita trama: un misterio con visos de folletín que alterna escenarios de lujo con ambientes sórdidos, repleto de hipocresía social y un erotismo nada grato.
Revolucionaria
El aplaudido escritor astur-mexicano Paco Ignacio Taibo II traslada por primera vez una de sus novelas al cómic. Se trata de 'Cuatro manos', originalmente publicada en 1994 y ganadora del premio internacional Dashiell Hammett, que ahora transforma en viñetas el dibujante francés Améziane.
Es una obra de narrativa compleja y dispar, estructurada en diversos segmentos que se suceden y entrecruzan; cada uno de ellos está anclado en distinto lugar y momento, por lo que también goza de diferente tratamiento gráfico y hasta cromático. En 1923, el actor Stan Laurel contempla en Ciudad Juárez el asesinato de Pancho Villa; en 1989 el lector asiste al desarrollo de los sombríos manejos de un departamento sumergido de la CIA que prepara un golpe en Nicaragua mientras dos periodistas comparten las ganancias de sus últimos trabajos: el americano Greg y el mexicano Julio. Norma es quien publica el primer álbum de esta magnífica adaptación, donde las historias de revoluciones y contrarrevoluciones se superponen como los propios recuerdos de los protagonistas.
Améziane es también guionista de la serie 'Golgoth aqua tek'mientras que el veterano Taibo, director de la Semana Negra, es autor de novelas como 'De Paso', 'Retornamos como sombras', 'Que todo es imposible' o una biografía del Che, además de personajes tan populares como el detective mexicano Héctor Belascoarán.
La ciudad del Murciélago
El oscuro barniz que tiñe habitualmente las aventuras de Batman ha propiciado el inicio de una nueva serie centrada en el principal cuerpo de policía de la conflictiva urbe. 'Gotham Central' es un producto de DC Comics del que Planeta ha publicado los primeros 15 números en un solo volumen. Aunque intervengan villanos como el Joker, Dos Caras o Mister Frío y además de la presencia tangencial del Hombre Murciélago, la serie se aleja del campo de los superhéroes para incidir de lleno en el género criminal; dotada de un áspero realismo, se decanta por un protagonismo colectivo al estilo de la televisiva 'Hill Street Blues', desgranando la cotidianidad de una comisaría repleta de problemas personales y profesionales.
Tres autores de lujo firman esta obra. El novelista Greg Rucka y el guionista Ed Brubaker (responsable de la muerte del Capitán América) escriben historias duras, sólidas y verosímiles centradas en el factor humano. Michael Lark aporta un dibujo naturalista y conciso donde el color y las sombras juegan un papel esencial.
El presente libro agrupa tres arcos argumentales: 'En la línea del deber', 'Media vida' y 'Objetivos fáciles'. El segundo de los cuales cobró especial notoriedad en su país de origen por el acertado tratamiento de la homosexualidad de uno de sus principales protagonistas, la detective Renee Montoya.
Y El Vaticano
La original propuesta de Yves Senté (actual guionista de dos series del prestigio de 'Thorgal' y 'Blake & Mortimer') consiste en crear a un agente especial tan eficiente como audaz que pertenece a los servicios secretos del Vaticano. 'Janitor' es el título de esta serie publicada por Norma y también la denominación del protagonista, uno de los doce elegidos por la Iglesia que actúa con autonomía y plenitud de poderes a nivel internacional. Vince es el nuevo Janitor, una suerte de 007 con sotana, que en el álbum titulado 'El ángel de Malta' se ve inmerso en una compleja intriga que combina espionaje, religión y política.
Un autor de lujo como François Boucq se ocupa del apartado gráfico. El dibujante de 'Cara de Luna', 'Bouncer' y 'Boca de diablo' aporta una estética densa, detallista en el trazo, capaz de recrear cualquier tipo de ambiente con un realismo documental que no excluye el matiz inquietante.